Dependiendo del país de procedencia y la cultura de cada persona, el ámbito laboral puede ser visto de muchas maneras.
La mayoría de las personas se desempeñan en trabajos convencionales con un horario que no cambia, haciendo las mismas actividades rutinarias por un sueldo fijo… a esto que es considerado una manera «normal» de trabajar, se le yuxtapone una muy distinta: los trabajadores independientes.
Ser un trabajador independiente es algo que todavía no está totalmente normalizado a la vista de la sociedad y son estos trabajadores quienes en cierto modo están cambiando las reglas del juego.
Existen muchas guías como la que puedes encontrar aquí sobre cómo ser freelance y aunque trabajar desde casa, suena como un gran regalo; también tiene sus cosas malas y por esa razón, es necesario compartir esas cosas que nadie te dijo sobre ser freelancer.
1) Ser contratado es igual de difícil
¿Pensabas que ir a una entrevista de trabajo era difícil? ¡Intenta que te contrate alguien que no te conoce y ni siquiera te puede ver! Aunque la tecnología de las videollamadas ha ayudado un poco a este tipo de contrataciones, no todos los clientes querrán hacerlo y tu contratación dependerá de una simple carta de presentación y una parte de tu portafolio.
Es probable que en una empresa se presenten 50 personas el día de la entrevista; no obstante, si usas una plataforma de búsqueda de trabajo online puede que estés compitiendo con más de 500 personas de todas las nacionalidades y con todos los niveles educativos. ¡Te deseamos suerte y que gane el mejor!
2) Distracciones por todas partes
Todos hablan sobre la maravilla de trabajar desde casa y no tener que ir a un aburrido lugar a laborar; no obstante, a veces el tener un lugar exclusivo de trabajo es necesario.
No intentes negarlo… ¡te vas a distraer! Trabajar desde casa te deja estar más cerca de los problemas de casa y como tal, intentarás resolverlos. Cocinar, lavar, limpiar, acomodar; etc son solo alguna de las cosas que te afectarán y ni hablar si tienes hijos, pues todo se duplicará.
Para no morir en el intento, es necesario tener una rutina de trabajo diaria y no interrumpirla cuando no sea estrictamente requerido. Si puedes, habilita un área de trabajo en tu hogar libre de distracciones para tener un mejor rendimiento.
3) La incansable búsqueda de trabajo
No tener un jefe es muchas veces una bendición, pero… a diferencia de los que tienen un jefe fijo y un trabajo fijo, el freelancer se encuentra constantemente en la búsqueda de trabajo.
Probablemente sea más fácil conseguir pequeños contratos que un contrato a largo plazo y es por eso que debes ponerte manos a la obra para crear una reputación.
Aunque suene algo aterrador, esto puede convertirse en la parte más divertida. El tener temáticas y trabajos variados, distintos proyectos y distintas personas harán que tus días sean todo menos aburridos. ¡No te rindas nunca y sigue en la búsqueda, pues cuando ya sepan tu nombre… serán los clientes quienes te busquen a ti!
4) ¿Eso es todo lo que piensas pagarme?
¿Creíste que por ser un freelancer escaparías de los explotadores? Lamentamos decirte que no, pues en todos lados habrá alguien que te exasperará. Muchos clientes creen que podrán regatear tu precio e incluso que no eres profesional por ser independiente… «Si lo fueras, estarías en una agencia o empresa» y esta creencia errónea hará que varios aprovechadores busquen menospreciar tu profesionalismo.
No te sientas obligado a regalar tu trabajo y recuerda que hay muchos clientes buscando gente como tú; de la misma manera que existe este tipo de personas también están quienes pagan lo justo por tu trabajo y ya llegará el cliente adecuado para ti.
Aunque estas situaciones pueden desanimar a más de uno, recuerda que las cosas buenas que ofrece ser freelancer son infinitas y que a veces hay que aguantar algunas cosas para poder llegar al éxito. Ganar dinero como trabajador independiente es posible y tener la posibilidad de ser tu propio jefe es una gran recompensa.
Si quieres ser un freelancer, en Gananci podrás ver las mejores páginas web para freelancers. Únete al movimiento de trabajar cuándo y dónde quieras y recuerda organizarte para sacarle provecho a cada minuto de tu tiempo. Si buscas trabajar desde casa, lee nuestra guía para conocer qué tipos de trabajos puedes desarrollar.