Si quieres poner un suelo de tarima flotante en tu casa la primera recomendación que podemos hacerte es que contrates a un profesional. De esta forma podrás recibir asesoramiento sobre materiales y calidades, y también sobre cómo escoger el aislante para la tarima.
La decisión del tipo de aislante es especialmente importante y puede que antes de lanzarte necesites más información. En este artículo vamos a ofrecerte algunos consejos para ponértelo más fácil a la hora de elegir.
Cómo escoger el aislante para la tarima
Estos suelos pueden parecer muy sencillos de poner, pero pueden dar mucho más trabajo del que se piensa. En realidad es necesario rebajar puertas, colocar nuevos rodapiés, dejar márgenes para los cambios producidos por el frío o el calor y realizar remates adecuados en la zona de los marcos de las puertas.
Todo esto sin contar con que una tarima mal colocada puede crujir y producir todo tipo de ruidos que pueden llegar a ser realmente incómodos en el hogar, sobre todo por la noche.
Pero quizás al solicitar presupuestos, una de las cosas que te sorprenda es que el precio total del trabajo puede variar significativamente en función del aislante que se coloque bajo la tarima.
Incluso si se eligen suelos de la misma calidad y precio y rodapiés también equivalentes, el aislante puede significar una diferencia importante en el presupuesto.
¿Quieres saber cuánto cuesta el aislante para tarima?
Actualmente puedes encontrar materiales aislantes para tarima por un precio entre 2 €/m2 y 40 €/m2. El corcho es una de las opciones más caras, mientras que la espuma es la más económica.
¿Merece la pena gastar más? ¿Cómo saber qué aislante necesitamos? Evidentemente, el consejo del profesional es muy importante, pero también es bueno tener unas nociones previas para poder saber qué es lo que se adapta más a nuestro ritmo de vida y qué podemos esperar de cada uno de los tipos de foam del mercado.
También es importante señalar que la capa de aislante no se debe de emplear para alisar el suelo o salvar desniveles y que este ya debe de estar suficientemente liso y nivelado antes de colocarla.
¿Qué características debe tener un buen aislante?
Para empezar, es importante tener claro qué condiciones tiene que cumplir un aislante óptimo para tarima. Por eso creemos que puede interesarte la siguiente lista, dado que recoge las características principales de este tipo de producto:
- Aislamiento frente a la humedad: Una de las principales funciones de un buen aislante consiste en evitar que la humedad del subsuelo llegue hasta la tarima.
- Aislamiento térmico: Este tipo de material también ayuda en cuanto al aprovechamiento de la energía. Funciona como aislante térmico guardando el calor del hogar.
- Absorción del ruido: El aislante también se encarga de amortiguar el ruido de las pisadas y contribuye a que el suelo sea más silencioso.
Solo quedaría añadir que, aunque hemos comentado que la capa de aislante no se debe utilizar para alisar el suelo, en ocasiones sí que se utiliza para nivelar la superficie. No obstante, esto solo es posible cuando el desnivel es mínimo.
Tipos de aislante más utilizados
Una vez que sabemos qué cualidades podemos exigir de un buen aislante, llega el momento de conocer los distintos productos que podemos encontrar en el mercado. Estos son los aislantes más utilizados:
Corcho
El corcho se trata, sin lugar a dudas, de la alternativa más natural. Pero además de ser una opción ecológica, posee otras ventajas interesantes.
Por ejemplo, ofrece una buena amortiguación, casi no se deforma y esconde muy bien las irregularidades del suelo. Además tiene una gran durabilidad y favorece el aislamiento acústico.
En cuanto a los inconvenientes que puede tener este material, el principal es su precio, ya que no es la opción más económica. Por otra parte, aguanta mal la humedad, por lo que no es recomendable colocarlo en estancias como la cocina o el baño. Y tampoco es conveniente si vas a instalar suelo radiante.
De todas formas, es una alternativa muy a tener en cuenta si estás pensando en colocar tarima flotante en tu inmueble.
Espuma
Es el tipo de aislante más popular, ya que suele ser el más económico. Además, es posible escoger entre varios tipos y calidades:
- Foam blanco básico: El foam básico es esa espuma blanca que se vende en rollos. Tiene un espesor de 2mm, aunque en algunos casos se venden rollos de 4mm. Un foam básico de 2 mm es suficiente en casas que no tienen problemas de humedad ni de ruidos y que además son cálidas. Si se quiere que ofrezca una mayor protección contra el frío y sea también aislante acústico, se debe de optar por la espuma de 4 mm.
- Foam de doble cara: Es igual que el anterior, pero una de las caras está recubierta por una película de aluminio que refuerza la capacidad aislante térmica y acústica, y protege también de la humedad. La cara de aluminio debe ir hacia arriba y se trata de un producto con mejor calidad, adecuado para aquellos que quieren que sus suelos queden más aislados y que no se produzcan tantos ruidos de cara al piso inferior.
No te preocupes por la variedad; el objetivo de todo esto es colocar una base aislante. En general, si hay mucha humedad en la casa, para proteger la tarima se puede colocar una base aislante plástica que va situada sobre el pavimento.
Sobre la misma se colocaría el foam de la manera habitual. No sería necesario utilizar el foam de doble cara.
Lo que todas estas espumas tienen en común es que aguantan bien la humedad. Además son ligeras y de fácil instalación. El principal inconveniente de este material es que se deforman con facilidad y, en general, no son muy duraderas.
Polietileno
Por último, nos queda hablar de un último material que también es muy utilizado como aislante de suelos: el polietileno o espuma de polietileno. En concreto, vamos a hablarte del polietileno negro.
Se trata de un aislante de mayor calidad que el foam normal, pero que también es más caro. Se fabrica en espesor normal, de 2mm, y en alta densidad, de 4mm. Ofrece un mayor aislamiento térmico y acústico, y se fabrica también en modelos especiales para suelos radiantes.
Un error que algunas personas cometen al elegir el aislante es querer ahorrar comprando el más barato y poniendo varias capas del mismo, hasta tres, para conseguir un mejor efecto. Sin embargo, con esto se corren más riesgos de desnivelar el suelo y de que aparezcan ruidos y crujidos con el paso del tiempo, por lo que no es en absoluto recomendable.
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– Si ya te has decidido a poner tarima flotante, puedes obtener más información sobre su precio de instalación desde aquí.
Oriol dice
Hola
Soy un particular y tengo dudas sobre el aislante para suelos laminados.
¿Qué me aconsejas para poner un aislante debajo de un suelo laminado?
No quiero el peor ni el mejor, quiero uno que esté bien un término medio de aislantes.
¿Pueden ayudarme?
Atentamente
Leticia Vallarelli dice
¡Hola, Oriol!
Muchas gracias por tu mensaje. Ya que cada caso es muy particular y a la hora de escoger un aislante influyen muchos factores (principalmente el presupuesto), desde Cronoshare te recomendamos que solicites precio para suelo laminado a nuestros profesionales, sin ningún compromiso, para recibir hasta cuatro tarifas y escoger, si así lo deseas, la que mejor encaje con tus necesidades.
¡Un saludo!