Emprender una reforma, como la reforma de un apartamento, es una decisión difícil de tomar. Por un lado tenemos el gasto económico que nos veremos obligados a desembolsar, y por otro la inseguridad y las molestias que puedan causar los trabajadores a ti y a la comunidad.
Por motivos como este, hay muchas personas que están preocupadas por los timos en reformas que en desafortunadas ocasiones pueden ocurrir. Estas prácticas ocurren bajo la promesa de un resultado óptimo a un precio mucho menor.
La primera regla de oro es que nadie regala nada, y a veces, lo barato sale caro.
¿Qué son los timos en reformas?
Los timos en reformas es una práctica muy poco habitual en el sector de las reformas, pero no por ello, invisible. Se trata de prácticas sin ética cuya finalidad es la de recaudar dinero sin prestar el servicio o directamente realizando un trabajo que presenta una calidad muy rebajada.
En el sector de las reformas es habitual adelantar dinero para la compra de materiales, etc. Es algo habitual y corriente, pero no se ha de adelantar más dinero del estrictamente necesario para la realización de la obra en el plazo que se acuerde.
Es decir, si la reforma tiene un plazo de finalización de un mes, y la empresa de reformas solicita un adelanto del total del importe de la reforma, aconsejamos no realizarlo.
Se han de abonar cantidades por espacios temporales (semanas, quincenas, etc.) o por hitos (desescombrado, alicatado, fontanería, etc.)
Desde esta plataforma avisamos que, por muy apetecible que parezca la oferta, siempre hay que buscar referencias que nos puedan decir si se trata de una estafa o no.
Diferencia entre fraude y estafa
En muchas ocasiones, sin tener que tratarse de una estafa, puedes caer en el error de contratar un fraude.
En los casos de fraude, el defraudador, que tiene una obligación con el defraudado, incumple o manipula documentos que corroboran las obligaciones entre ambos, como por ejemplo un contrato, para sacar provecho.
De esta forma, aunque veamos finalizadas nuestras reformas, cabe la posibilidad de que en un futuro cercano nos demos cuenta de que tanto los materiales como la mano de obra han sido rebajados para un resultado mediocre.
Una de las consecuencias más desagradables de los fraudes en reformas es la aparición de problemas en el futuro, una vez pasado meses o incluso año tras la reforma.
Estos desagradables problemas se materializan en la aparición de grietas, las goteras, una instalación eléctrica defectuosa, una mala señal de antena, etc.
En definitiva, una obra frágil y poco duradera que a la larga nos obligará a gastar más dinero.
Consejos para evitar los timos en reformas
Las empresas de reformas nos enviarán una serie de propuestas que debemos revisar antes de decidirnos.
Para empezar, estos presupuestos deben estar por escrito (papel o digital), siendo lo más detallados posibles y conteniendo datos importantes de verificación como el nombre de la empresa, la dirección o los datos fiscales de la misma (NIF, CIF).
Esto ya supone una garantía, pues en cualquier momento podemos comprobar si estos datos son reales con una simple búsqueda en internet.
Además, el presupuesto también debe contener la fecha, la validez del mismo y partidas presupuestarias como los precios de mano de obra, el IVA o los materiales.
Si queremos asegurarnos de que todo se cumple como es debido, es aconsejable seguir alguno de los siguientes pasos para evitar estas molestias de pérdida de tiempo y dinero:
- Comprueba si es una empresa verificada. Asegúrate de que la empresa cumpla con la legislación vigente o si forma parte de alguna asociación pertinente.
- Busca referencias. Siempre es aconsejable observar la opinión que merece la persona o entidad respecto a trabajos anteriores. Esto de dará una buena idea de los puntos fuertes y flojos y si se trata de un profesional adecuado para ti.
- Comprueba si tienen un seguro de responsabilidad civil. Confirma siempre que la empresa que contrates tenga un seguro de responsabilidad civil. De lo contrario estarás en problemas en caso de accidente.
- La forma de pago más adecuada es fraccionada por hitos. Nunca pagues por adelantado.
- Firma un contrato privado con la empresa de reformas. En este contrato deberán figurar los plazos, la ejecución de la reforma, calidad de los materiales, extras no incluidos, etc. Además todo aquello que pueda ser objeto de discusión y malentendidos, recomendamos especificarlo en el contrato. Puedes descargar una plantilla de contrato de reformas para tu comodidad.
Puede parecer complicado encontrar, entre toda la oferta que existe en el sector, a un profesional que cumpla todos los requisitos anteriormente mencionados, pero nada más lejos de la realidad.
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