La entrada de la casa es lo primero que todo el mundo va a ver de la misma y por tanto es importante para causar una buena impresión.
No obstante, no todo el mundo le dedica el tiempo necesario para que quede bien presentada y se vea bonita.
Planificar bien la entrada de la casa es importante para la distribución de la misma y por eso hay que cuidarla cuando se hace una reforma. Aquí van algunas ideas para conseguir reformar una entrada de casa de forma que esté a la altura de las expectativas.
Entrada de una casa unifamiliar
Cuando se tiene una vivienda unifamiliar y se va a reformar la entrada es buena idea hacerlo de manera que esta sea doble.
Es decir, que haya dos puertas de entrada a la vivienda, una a continuación de la otra y con un espacio entre ambas.
Esto es muy práctico para evitar fugas de calor o de aire fresco desde el interior de la vivienda. Cuando alguien va a abrir la puerta de la calle abre primero la puerta que comunica con ese recibidor, la cierra y a continuación es cuando abre la puerta que da a la calle. Así garantiza un mejor aislamiento.
Este recibidor suele ser muy pequeño, pero es buena idea que cuente con un armario empotrado para poder dejar allí los zapatos de la calle o los abrigos mojados, así como los paraguas. Si la familia se acostumbra a dejar los zapatos en este espacio y ponerse zapatillas, la limpieza de la casa durará mucho más y será más efectiva.
Entrada convencional a un apartamento
Las entradas convencionales a un apartamento son las que ofrecen más juego, especialmente si cuentan con algo de espacio. Las entradas estilo americanas están gustando mucho últimamente.
Consisten en un mueble que tiene un estante en la parte superior, colgador para la ropa y un banco para sentarse. Esto permite llegar y quitarse el abrigo, ponerse las zapatillas que estarán en el interior del banco y pasar a la casa sin manchar.
Además, son muy atractivas porque se pueden hacer a medida en madera y pintarlas en contraste con el color que se ponga en la pared, o bien forrar toda la entrada con madera del mismo color del mueble creando una sensación de uniformidad muy cálida.
Los recubrimientos de madera en la pared son muy atractivos en la zona de la entrada ya que generalmente se mancha mucho la pintura porque todo entra por ahí, desde muebles hasta personas con bolsas, etc. Los recubrimientos evitan tener que pintar con frecuencia.
Entrada directa al salón
En los apartamentos más pequeños o en aquellos que solo tienen un espacio la entrada suele dar directa al salón. Aquí es complicado hacer nada ya que no da mucho juego, pero se puede utilizar un biombo para preservar la intimidad del interior de la vivienda.
4 Trucos para que la entrada parezca más grande
Ya hemos visto que, por lo general, las entradas o recibidores suelen ser espacios más bien reducidos. Sin embargo, esto no quiere decir que no podamos sacarle partido.
A continuación te contamos algunos trucos para conseguir que tu entrada parezca más grande.
Usa colores claros
Los tonos claros dan más luz y hacen que la habitación parezca más grande. Es conveniente evitar el blanco, que queda muy frío, pero sí puedes optar por colores perlados, tonos pastel o tonos beige más clásicos.
Combinar dos colores, uno de la mitad de la pared para abajo y otro de la mitad de la pared para arriba, quedará muy bien y dará también una cierta sensación de amplitud. Pero para conseguir este efecto el tono de abajo debe ser ligeramente más oscuro que el de arriba. Los amarillos, naranjas o verdes son perfectos para ello.
El suelo, en tonos brillantes
Los suelos claros y con brillo dan una mayor sensación de amplitud. El brillo refleja la luz y hace que todo se vea más luminoso y más amplio por lo que visualmente es positivo.
También puedes decidirte a instalar tarima flotante, pero siempre en colores claros. Es importante ser consciente del tamaño de la entrada y, aunque puedan ponerse de moda los suelos oscuros, nuestro consejo es optar siempre por colores suaves.
Los espejos son fundamentales
Los espejos te ayudan a jugar con el espacio y la luz. Bien usados lograrán que el recibidor se vea más grande.
Te sugerimos espejos de cuerpo entero y de obra, para que queden integrados en la pared. Este tipo de espejos de obra son muy prácticos en entradas pequeñas, ya que ocupan muy poco y permiten jugar con el espacio.
También puedes usar espejos convencionales si eres amante de los marcos, pero procura que no sean demasiado voluminosos para que no ocupen mucho sitio.
Escoge muebles muy estrechos
Los muebles ocupan mucho espacio y pueden ser un problema en una entrada de tamaño reducido. Si escoges muebles muy estrechos, todo será más fácil.
Un buen ejemplo actual son esos taquillones para la entrada tan finos, casi la mitad de uno convencional. Adornan, sirven para tener un lugar en el que dejar las llaves y no ocupan el ancho de los de toda la vida.
También puedes optar por poner un estante o repisa en la entrada en lugar de un mueble completo. No ocupará tanto espacio real y, además, visualmente también hará parecer más amplio el recibidor.
Independientemente de cómo vayas a reformar tu casa y del tipo de entrada que vayas a hacer, te recomendamos pedir presupuestos a profesionales de las reformas que te darán sus presupuestos y sus consejos sin ningún tipo de compromiso.