Diez trucos efectivos para desatascar tuberías

Una tubería atascada siempre es un dolor de cabeza. Además es un problema bastante frecuente por el que la mayoría hemos tenido que pasa alguna vez. En este artículo te traemos diez trucos efectivos para desatascar tuberías.

Sigue leyendo si te interesa conocer varias claves para desatascar una tubería.

Un atasco en las tuberías siempre es un problema muy molesto y que conviene solucionar cuanto antes. Cuando ocurre te encuentras con que no puedes utilizar el sanitario y se produce una situación muy incómoda.

El primer paso es averiguar por qué se ha producido el atasco. Una vez tengas eso claro tendrás que escoger la solución que mejor se adapte a tu problema.

¿Qué puede producir un atasco?

Existen muchas acciones que pueden generar un atasco a la larga. En este artículo queremos indicarte algunas de las más comunes:

• Acumulación de restos y suciedad.
• Instalar una tubería de forma poco adecuada.
• Desechar materiales de forma incorrecta o poco eficaz.

Diez trucos efectivos para desatascar tuberías

Cuando ya sabes qué ha producido el atasco llega el momento de decidir el sistema para solucionarlo. A continuación te ofrecemos diez trucos para que puedas desatascar tus tuberías fácilmente.

Es la solución más evidente y probablemente ya lo hayas intentando. En cualquier caso, te contamos cómo utilizar esta técnica de forma correcta para conseguir desatascar la tubería.

En primer lugar, es importante que llenes el sanitario con un poco de agua hasta empapar el desatascador.

Si necesitas desatascar un fregadero, antes de comenzar a realizar ningún movimiento debes tapar el rebosadero con un paño o toalla para producir un efecto de vacío.

Una vez esté todo preparado debes comenzar a realizar movimientos rápidos, empujando hacia dentro y tirando hacia fuera. De esta forma crearás una presión que ayudará a desatascar la tubería.

Este sistema puede ser utilizado para solucionar pequeños atascos, y puedes optar por distintos tipos de desatascadores manuales:

• Desatascador de ventosa: Es el más común y el que probablemente tengas en casa. Funciona por succión. Al tirar del mango del desatascador succiona los depósitos de suciedad junto al agua detenida. Es conveniente que repitas esta acción varias veces y que vayas recogiendo la suciedad que salga.
• Desatascador neumático: Es una versión moderna del desatascador tradicional. Funciona por empuje de aire y succión. Debes apoyarlo en el desagüe y accionar el mango de arriba abajo. Tienes que repetir esta acción varias veces y de forma rápida. Así estarás introduciendo presión en el conducto y succionarás los restos de suciedad.

Esta es otra de la alternativa más usadas porque hoy en día se comercializan muchos productos especializados para desatascar tuberías. Se les conoce como desatascadores químicos.

Puedes encontrarlos en forma de gel, líquidos o en gránulos. Su composición está pensada para disolver químicamente la grasa y otros residuos orgánicos. A la hora de utilizarlos debes tomar precauciones: ponte guantes y procura no respirar sus vapores.

Aunque es probable que este tipo de productos solucionen tu problema de forma eficaz no te los recomendamos como primera opción. Suelen ser sustancias químicas muy fuertes que pueden llegar a dañar tus tuberías. Además son bastante contaminantes para el medio ambiente.

Si estás convencido de que hay algo obstruyendo la tubería puedes probar con este sistema. Se trata de introducir un alambre por el desagüe para recoger los residuos que están provocando el atasco.

Precisamente este es el sistema que utilizan los desatascadores de muelle. Vas introduciendo el muelle y girando cada vez. Así vas empujando la suciedad hacia adelante y, al sacar el muelle, la arrastras fuera.

Este es un truco muy sencillo. Únicamente debes hervir agua con sal en una olla. Después, y con cuidado, debes verter el agua hirviendo en el desagüe.

Es importante que lo vayas haciendo poco a poco, en distintas tandas. De esta forma el atasco se irá deshaciendo poco a poco.

Es fácil que ya tengas estos dos ingredientes por casa, por lo que se trata de una solución muy económica. Primero debes verter unas cinco cucharadas o cerca de media taza de bicarbonato y, seguidamente, una taza de vinagre.

El bicarbonato y el vinagre reaccionarán al entrar en contacto y se generará una especie de espuma. Debes dejar reposar la mezcla al menos media hora. Para aclararlo deberás verter agua hirviendo y el atasco habrá desaparecido.

Las sales de frutas es otro tipo de producto que es fácil encontrar en cualquier casa. También podemos combinarlo con el vinagre para lograr desatascar nuestras tuberías.

En este caso es suficiente con añadir tres cucharadas de sales de fruta y después medio vaso de vinagre. Es importante que dejes trabajar a la mezcla durante unos minutos. Después bastará con aclarar con agua fría y tu problema estará solucionado.

Otro truco para desatascar una tubería es lubricarla con jabón para que la grasa se deslice. Puedes utilizar lavavajillas líquido concentrado para ello.

El primer paso es introducir el jabón en la tubería. Después tienes que verter agua hirviendo por la cañería. De esta forma facilitarás la eliminación de la obstrucción.

Este producto es más agresivo que los que hemos ido mencionando. Es importante que no lo combines nunca con la sosa cáustica porque cuando ambos se juntan se produce una fuerte reacción exotérmica.

También debes proteger tus manos y utilizar una mascarilla si es posible. No lo toques nunca con las manos desnudas.

Es un buen sistema para eliminar cal o sales que puedan estar atascadas. Primero tienes que eliminar el agua de la zona atascada. Después debes introducir el salfumán por la tubería y dejarlo actuar durante una hora. Por último, remueve con mucha agua.

Este método debes utilizarlo únicamente como una de las últimas alternativas. No debes repetirlo muy de seguido porque el salfumán puede atacar al metal y debilitar las tuberías.

Es otro producto muy agresivo. Es corrosivo por lo que puede ayudar a eliminar lo que sea que esté obstruyendo tus tuberías. No debes mezclarla con ningún tipo de ácidos o productos de limpieza.

Algunas otras precauciones son no tocarla nunca con las manos desnudas y protegerte bien la piel.

Debes asegurarte de que no haya agua en la zona donde vas a utilizarla. Tienes que introducir una taza de sosa cáustica en la tubería atascada. Después tienes que verter agua hirviendo y dejarlo reposar alrededor de media hora.

Si pasado ese tiempo compruebas que el atasco ha disminuido puedes repetir el proceso. Si no ha mejorado no te recomendamos utilizarlo de nuevo.

Probablemente este es el producto más difícil de encontrar en una casa. De hecho, para conseguirlo es posible que tengas que acudir a una tienda especializada.

Es un producto muy peligroso, por lo que tienes que tomar muchas más precauciones que con el salfumán o la sosa cáustica. Si nunca lo has utilizado ni tienes idea de sus reacciones en contacto con el metal o la piel no deberías utilizarlo.

¿Todo lo demás ha fallado? ¿Sigue el atasco? No hoy problema. En Cronoshare puedes pedir presupuesto hasta 4 fontaneros de tu zona para quitar el atasco, de forma rápida y profesional.

¿Cómo evitar futuros problemas?

Para terminar queremos ofrecerte algunos consejos para que puedas evitar que se repita el problema:

• Nunca tires aceite por el desagüe. La forma correcta de deshacerte de él es en un punto limpio dentro de un recipiente de plástico.
• Tira los desechos de comida antes de lavar los platos.
• Para evitar atascos en la ducha retira los pelos después de cada uso.
• No tires nada que no sea papel por el váter.
• Es importante que evites tirar sustancias químicas como pintura o disolventes por las tuberías. Tampoco es aconsejable que arrojes cera caliente o productos parecidos.

Esperamos que este artículo te haya resultado útil pero recuerda: en ocasiones lo mejor es contactar con un profesional que pueda ayudarte desde su experiencia, aunque el precio del desatasco sea más elevado.