Hay quien dice que el método de estudio es un tema personal de cada uno y que no existe el modelo perfecto. En Cronoshare pensamos que aunque no exista la técnica perfecta, existen 10 mejores técnicas de estudio que te ayudarán a aprobar con menos esfuerzo.

La mejor opción siempre es combinar varias técnicas en función de las características o capacidades del alumno, pero para ello tenemos que saber cuales elegir y porque. A continuación os detallamos las 10 técnicas de estudio más utilizadas y los objetivos que con ellas podremos obtener.

Las 10 mejores técnicas de estudio

1. Interrogatorio elaborado: Consiste en plantear preguntas entre dos o más alumnos para saber explicar porque un concepto es verdadero o no. Su principal objetivo es consolidar el proceso de información mental y estructura la información en base a su utilidad y su compresión. Muy eficaz en materias que se centran más en el entendimiento de lo que se esta explicando que en la memorización. Por ejemplo: Historia, filosofía, definiciones, listados…
2. Autoexplicación: Muy parecido al interrogatorio elaborado, pero es totalmente personal dado que no necesitas a nadie que te formule las preguntas. La técnica consiste en hacer un repaso del temario y relacionarlo con conceptos que ya tenemos asimilados. El objetivo que persigue es la comprensión, la interrelacion de conceptos entre diferentes materias y la consolidación de la información. Además, relacionar los temarios de una asignatura con otra nos ayudará a explicar los conceptos de manera más clara en un examen o trabajo y será más fácil hacer uso practico de esos conceptos.
3. Resumir: La técnica del resumen puede dar a confusión o exceso de confianza. Debemos tener siempre en cuenta que el resumen es una breve descripción de una idea o concepto que conocemos y sabemos desarrollar, el error viene cuando el estudiante realiza un resumen en la primera toma de contacto con la materia y estudia directamente del resumen: falta de detalles, poca precisión, más complicado para realizar un interrogatorio o una autoexplicación, falsa sensación de saberte la materia…Para hacer buen uso del resumen, primero debemos leernos varias veces el temario, tener claros todos los conceptos o al menos una ligera idea de lo que son, y después realizar el esquema o resumen. Esta técnica sirve para consolidar la información, NUNCA para asimilarla dado que lo más seguro es que nos saltemos detalles o elementos importantes a la hora de recordar la información.
4. Subrayar: Resulta imprescindible resaltar lo más importante cuando estudiemos, ya sea con un lápiz, un subrayador, un post-it o cualquier otro método. Esto no quiere decir que lo demás sobres, pero ayuda al cerebro a identificar las partes más relevantes del texto cuando lo esta leyendo. En definitiva es lo mismo que realizar un resumen, pero evitas crear un nuevo documento con la información reducida, simplemente resaltas lo que más importante te resulte del texto a la vez que sigues leyendo la totalidad de la información.
5. Nmotecnia: Hacer uso de palabras, anacronismo, canciones o cualquier elemento fácil de recordar para relacionarlo con conceptos o listas de nuestro temario. Funciona muy bien para recordar listas o definiciones muy largas, pero por otro lado fomenta la memorización sin asimilar la información, solo repetimos lo que pone en el libro sin analizar su significado y lo que implica. Esta herramienta la consideramos la antagónica al interrogatorio elaborado y la autoexplicación.
6. Respaldarse en imágenes: Las imágenes son un complemento perfecto para los textos porque crean una relación entre lo que ves y lo que lees, facilitando el aprendizaje y la asimilación de los conceptos. Ademas, pueden servir como posibles nmotecnia a la hora de acordarse de un concepto o un texto. Siempre que sea posible, combina textos con dibujos, tanto en el libro como en los resúmenes.
7. Releer, releer y releer: Se considera la técnica preferida para los más perezosos, pero en nuestra opinión es justamente al contrario. Es mucho más sencillo seguir un hilo de aprendizaje escribiendo o subrayando para reforzar el estimulo, que leyendo y leyendo mil veces lo mismo. Tanto la concentración como el interés irán decreciendo a medida que vayamos leyendo.
8. Examen de repaso: Realizar pruebas escritas y controles ayuda mucho al alumno a enfrentarse a la temida «Hoja en blanco». Ademas sirve para saber si tengo o no los conceptos organizados, si me suena que me falta algo en esta respuesta, o si creo que esta perfecta y luego al repasar te das cuenta de que te falta algo.
9. Programación y planificación: Si te consideras un héroe, o te gustan las cosas difíciles, déjate todo para el ultimo día. Si en cambio eres una persona vaga y quieres hacer las cosas fáciles, organízate. Empieza a leerte el tema que quieres estudiar al menos dos o tres semanas antes del examen, no hace falta que estudies, solo lectura y comprensión. Una semana después ya deberías de estar empezando a hacer esquemas y resúmenes. Cuanto antes empieces más fácil y cómodo será estudiar.
10. Descansos e intercalos: Recientes investigaciones han concluido que lo más sano y recomendable para estudiar es realizar descansos de 15 minutos cada 45 de estudio. Es muy importante descansar de vez en cuando para despejar la mente y estar más receptivo. Otra de las cosas que podemos hacer para no saturarnos con información es ir cambiando de materias, empieza por historia leyendo y entendiendo, luego haz unos cuantos ejercicios de matemáticas, continua leyendo biología…

En Cronoshare nos están llegando bastantes solicitudes de mejora en técnicas de estudios desde el año pasado, y creemos que es un tema candente y que es importante comunicar tanto a padres, como profesores y alumnos.