Reformamos nuestro hogar para que parezca lo suficientemente agradable para nosotros; para que cumpla las expectativas que le marcamos en cuanto a confort y comodidad. Pero en muchas ocasiones lo que nos interesa de una reforma va más allá de satisfacer nuestros deseos estéticos y personales. Estamos hablando de una estrategia muy actual: reformar para vender.
El principal objetivo es recuperar la inversión que se hizo en un primer momento en la vivienda y, si es posible, obtener beneficios. Y precisamente por esto nos suele asaltar la misma duda: ¿La inversión vale la pena?
Desde Cronoshare respondemos a esta pregunta y te contamos cuáles son las reformas para vender una vivienda más habituales.
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¿Vale la pena reformar para vender?
Es verdad que hoy en día vender una casa no es una tarea fácil. Sin embargo, un piso que parezca nuevo siempre es más cotizado.
El valor que adquirirá un piso tras una reforma se verá aumentado, de eso no hay duda, pero las dudas más habituales son en qué medida lo incrementa y si es útil. Es decir: ¿Vale la pena reformar un piso para venderlo después?
La respuesta a esta pregunta es un rotundo sí. Contratar a un experto en reformas puede ser el aporte extra que necesita el inmueble para ser adquirido.
Es posible que pienses que no merece la pena cuando los compradores buscan algo barato, pero estarías olvidando que hay una buena porción de compradores que desean comprar viviendas en buen estado a un buen precio.
¿Qué tienes que tener en cuenta?
Es cierto que visto así, todo parece muy fácil. Sin embargo, nunca puedes perder de vista que no hay ninguna fórmula que nos permita estar seguros de hasta qué punto se va a revalorizar el inmueble.
Por eso hemos creído oportuno ofrecerte algunos consejos o advertencias que es conveniente que tengas en cuenta.
Para empezar, lo primero que debes preguntarte es si cuentas con los fondos suficientes para realizar la reforma. Y es que si necesitas pedir un préstamo, no es aconsejable llevar a cabo la reforma, ya que es posible que no consigas sacarle toda la rentabilidad deseada.
Pero esto no quiere decir que no tengas otras opciones. Una buena alternativa a una reforma integral es realizar simplemente un lavado de cara al inmueble: pintarlo, cambiar la decoración, etc. Resultará mucho más barato y mejorarás la primera impresión de la vivienda.
También es importante que valores la antigüedad de la casa. En las viviendas más antiguas el coste de la reforma puede ser demasiado elevado comparado con los beneficios que pretendes conseguir.
No obstante, al final todo dependerá del potencial de la vivienda, ya que incluso una casa antigua, si tiene mucho potencial, puede alcanzar un buen valor de venta con la reforma adecuada.
Reformas para revalorizar una vivienda
¿Qué es lo que suelen buscar los compradores? Por lo general, hay diversas reformas que suelen generar una mayor atracción hacia la vivienda y que aumentan su valor: las que favorecen una mejor iluminación, las que se orientan a mejorar la eficiencia energética, las de cocinas y baños…
Tal vez te preocupe cuánto puede costar una reforma integral, pero no siempre es necesario llegar tan lejos. Muchas veces es suficiente con escoger bien los aspectos sobre los que se va a actuar.
A continuación te hablamos de algunas de las reformas más frecuentes en viviendas que van a venderse.
Pequeños desperfectos o averías
No podemos perder de vista que la primera impresión es muy importante. En este sentido, hay ciertos trabajos que es imprescindible que se lleven a cabo: puertas que no abran o cierren bien, muebles en mal estado o que se han quedado anticuados, etc.
Son pequeños detalles que pueden marcar una gran diferencia de cara a los posibles compradores y que no suponen un coste demasiado elevado.
Pintura
Pintar las paredes es otro punto casi imprescindible. No tiene por qué ser necesario si las paredes se encuentran en buen estado, pero sí que es muy recomendable porque contribuirá a mejorar la estética de la vivienda.
Por lo general, se suelen escoger colores luminosos y neutros, como el blanco o el beis.
Suelos
Con respecto a los suelos hay diversas opciones: un buen pulido puede ser suficiente, pero también puedes optar por cambiarlos si están en muy mal estado o tienen un aspecto anticuado.
Los suelos en madera, como el parquet, ayudarán a crear un ambiente más cálido y pueden ser una buena elección.
Iluminación
Como ya habíamos adelantado, una de las cosas que más suelen valorar los posibles compradores es la iluminación.
Lo más aconsejable es intentar aprovechar al máximo la luz natural. También podemos cambiar algunos puntos de luz para conseguir que la vivienda sea lo más luminosa posible.
Nuevos espacios
Los espacios diáfanos y amplios venden más. Por eso a veces puede ser conveniente tirar algún tabique para poder ampliar una estancia o contribuir a generar esa sensación de amplitud.
Por ejemplo, cada vez es más habitual abrir la cocina al salón eliminando las paredes de separación.
Almacenaje
Los espacios de almacenamiento siempre son de agradecer. En relación a esto, los armarios empotrados se convierten en los grandes protagonistas, ya que nos permiten conseguir un mayor espacio de almacenaje y se integran a la perfección en cualquier estancia.
Eficiencia energética
Este es un aspecto que deberías tener en cuenta especialmente. Hay muchas formas de mejorar la eficiencia energética de un inmueble y que contribuirán definitivamente a aumentar su precio de venta.
Por ejemplo, podemos renovar las puertas y ventanas con el objetivo de mejorar el aislamiento térmico y acústico de la vivienda.
Si el inmueble tiene una terraza, también podemos cerrarla con un aislamiento adecuado. Además, de esta forma estaremos aumentando la superficie útil de la vivienda.
Cocina y baño
Una cocina y un baño en condiciones pueden ser lo que haga que los compradores terminen de decidirse, por lo que también deberías tenerlo en cuenta.
La cocina es una de las primeras estancias que se suelen reformar cuando se quiere vender una vivienda. Es cierto que hay que valorar el desembolso necesario para una reforma en condiciones, pero a la larga suele compensar.
Como ya hemos indicado, una de las reformas más habituales tiene que ver con abrir la cocina al comedor, pero también podemos aprovechar para actualizar los electrodomésticos o las encimeras.
En cuanto a la reforma del cuarto de baño, lo más habitual es cambiar la bañera por un plato de ducha y, en general, renovar la estética del mismo para que resulte más atractivo.
Nuevas tecnologías
Cada vez nos atrae más todo lo que tiene que ver con las nuevas tecnologías. Hoy en día es posible incorporar en una vivienda sistemas de domótica, lo que sin duda la hará mucho más atractiva a los ojos de posibles compradores.
Como ves, existen múltiples opciones para reformar una vivienda con el objetivo de aumentar su valor de cara a una venta.
En Cronoshare contamos con profesionales especializados en el sector de las reformas. Podrás recibir hasta cuatro presupuestos para decidir cuál te conviene más.
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Totalmente de acuerdo con el artículo. Como home stager puedo asegurar que una buena reforma puede aumentar el precio de la vivienda entre un 10% – 20%. Sí es verdad que se debe tener mucho cuido a la hora de decidir qué y cómo se reforma. Es por ello que es aconsejable contratar a un profesional, ya sea un Interiorista o un Home Stager (especialistas en decoración de inmuebles para la venta o alquiler). Ellos pueden ayudarte a decidir cómo reformar, qué acabados son necesarios en el inmueble para conseguir una decoración lo suficientemente neutra que atraiga a la mayor variedad de posibles compradores. Existen una gran cantidad de alternativas en materiales, diseños, colores… Para no perderte entre este amplio abanico de opciones déjalo en manos de un profesional.
Sin ninguna duda reformar la casa para venderla me parece una buena opción. Yo soy diseñadora de interiores y, obviamente, me apasiona la decoración. Sé que no es algo fácil porque inviertes mucho dinero, pero tengo claro, en mis años de trabajo, que una casa reformada, bien decorada y con buena imagen aumenta los compradores. Como bien se dice en el artículo, puedes llegar a vender tu casa a un buen precio que antes no optabas y solo por el diseño. Cuando un comprador quiere ver la casa, debe imaginársela bonita, bien decorada, como quedaría en el caso de que viviera. Si le enseñas una casa vacía y pobre, se lo puede imaginar pero el impacto no será tan fuerte como si lo ve en persona. Como diseñadora, sin ninguna duda, te digo que si tienes una terraza optes por el gres porcelánico: es un material superresistente y precioso, le dará un toque distinto a tu hogar, más en armonía, y te aseguro que será una terraza de película que más de uno querrá. A estas alturas, mi casa está preciosa y también os digo, yo empecé a reformarla para venderla y con la tontería… ¡al final me quedé en ella porque el resultado me pareció espectacular!